lunes, 25 de octubre de 2010

Escribir un guión de cine

Hola a todos,

Hace ya algún tiempo un amigo me comentó que había escrito un guión. En su momento la idea me pareció bastante curiosa, dado que era algo que yo no me había planteado nunca. Siempre me he centrado en novelas, pero luego comencé a darle vueltas a una idea que había tenido y que no me acababa de encajar, y descubrí que en realidad podría ser un buen guión de cine.

Me hice un esbozo muy básico de la historia pero, en ese momento, me di cuenta de que no tenía ni idea de cómo se estructuraba un guión, así que me puse a investigar un poco y descubrí que es bastante sencillo, lo complicado, como en las novelas, es escribir una buena obra.

Existen dos tipos de guiones, el literario (el que escribe un guionista) y el de producción (el final una vez adaptado por el director) que tienen diferencias de formato. Aquí voy a hablar sobre el primero.

Al igual que una novela se estructura en capítulos, un guión se estructura en escenas. Si os fijáis en la mayoría de las películas o series de televisión, comprobaréis que la trama se va desarrollando en saltos, cada uno de ellos terminado con un corte de la cámara (ya sé que en 'La Soga' de Hitchcock no hay más que dos cortes y para cambiar el rollo de película, pero esto es sólo una simplificación)

Los guiones tienen un formato muy determinado, tal y como podéis ver en la imagen (extraída de la Wikipedia). Por lo que he leído, la razón estriba en que, con dicho formato, cada página del guión corresponde aproximadamente a un minuto de película.



Un guión lo forman seis elementos, cada uno con su formato determinado. Los cuatro más importantes son:

1) Encabezado: Es el título de la escena, indica el lugar en el que ocurre, si es exterior o interior y a qué hora del día ocurre (aproximadamente)
2) Descripción: Uno o varios párrafos en los que se describe lo que pasa DESDE EL PUNTO DE VISTA DE LA CÁMARA. Recordemos que es una película, no se puede saber lo que piensan los personajes. Algo del estilo:’ Pepa entra en la sala, enciende la luz y descubre el cadáver de Manolo en el suelo frente a él. Pepa grita y se desmaya’. Se escribe siempre en presente.
3) Personaje: Antes de cada diálogo se incorpora una línea con el nombre del personaje que va a hablar ese diálogo. Va siempre en mayúsculas y puede estar acompañado por una indicación de si se trata de un narrador o si el personaje no aparece en la escena (es una voz que está hablando por teléfono, por ejemplo)
4) Diálogo: Indica las palabras que dirán los actores. Se escriben en minúsculas, centrado en la hoja y con unos márgenes muy característicos.

Como he comentado antes, cada uno de los elementos tiene un formato muy característico en cuanto a tipo de letra, márgenes, uso de mayúsculas y minúsculas o situación dentro del texto. Para aquellos que queráis una descripción algo más detallada la podéis encontrar en la propia wikipedia: http://es.wikipedia.org/wiki/Gui%C3%B3n_cinematogr%C3%A1fico y, posteriormente, pasar a alguno de los libros que te detallan todo el proceso de escritura de guiones.

Otra opción más práctica es buscar uno de los muchos programas de escritura de guiones, los cuales ya traen implantado el formato correcto. Yo bajé una versión beta de uno de ellos pero, lamentablemente, no he dedicado mucho tiempo a revisarlo, por lo que no incluiré ninguna recomendación.

La idea de escribir un guión de cine me tienta bastante, pero he de añadir que, pese a disponer del esqueleto básico de una buena historia, una vez escrito me enfrentaría con otro problema: ¿Dónde se puede enviar un guión? ¿A una productora? ¿A una cadena de televisión?

Supongo que eso habrá que dejarlo para otra entrada.

Un saludo

lunes, 18 de octubre de 2010

La comida en Bizancio

Hola a todos,

Prosigo con las entradas sobre curiosidades bizantinas, y hoy le toca el turno a la comida. Aunque parezca increíble, existen libros enteros dedicados a la cocina en bizancio, en los que se adjuntan desde recetas hasta un listado de los alimentos que se recomendaban por aquel entonces según la estación.

La mayoría de los datos los he extraído de los libros:

Flavours of Byzantium. Andrew Dalby
Daily Life in the Byzantine empire. Marcus Louis Rautman.
Eat, drink and be merry. Anthony Brier, Leslie Brubaker, Kalliroe Linardou




Para iniciar esta entrada, comentar que en el siglo VI los bizantinos aún comían según la moda romana, es decir, tumbados. Eso no quita que el pueblo llano y en las tascas o tabernas no se comiera sentado sobre un taburete ante una mesa, pero aún se conservaba la tradición en las casas de clase media y alta. Lo normal era comer en un diván semicircular llamado stibadium.



La mesa para comer se cubría con un mantel con bordados geométricos o con figuras de pájaros.
Se comía reclinado sobre el brazo izquierdo, sobre un lecho acolchado. En la mesa central que rodeaba el stibadium se ponía un plato del que todos comían, añadiendo pan ya cortado alrededor (cada comensal tenía su rebanada)
Se comía con los dedos, y no había cubiertos sobre la mesa salvo para platos especiales. Las salsas se ofrecían en cuencos aparte, de modo que cada comensal se pudiera echar la cantidad que quisiera.
El plato central solía ser ancho, de base plana y un pequeño reborde elevado en el extremo. Las copas podían ser de metales preciosos, vidrio verdoso o cerámica

Por regla general, el pueblo llano tomaba dos comidas al día, la primera, ariston o también llamada geuma, a medio día. La más rica era la de deipnon, antes de anochecer, y era la única comida caliente al día, si acaso, por que la leña no era barata y el carbón resultaba más caro aún.

El azúcar, jengibre, la pimienta y el sándalo venían de la India, al igual que el nardo, mientras que la nuez moscada, el clavo y el macis venían de Indonesia. La canela venía del sur de China. De los ríos rusos llegaba sal, esturión ahumado y sal.

Ahora que menciono el esturión, como curiosidad, los bizantinos no sabían ahumar, por lo que el secado se hacía al sol.

Justo la semana de antes de la cuaresma era la semana del queso e tyrine, en la cual se podía comer queso, leche y mantequilla, pero no carne. La cuaresma empezaba con el domingo tes apokreos, o 'no más carne' y el final de la cuaresma era el jueves santo. Ese día se tomaba el cordero pascual

La comida típica del ejército, o de los viajeros que no podían encontrar pan normal del día, era la rosca de bucellatum y el pan de cebada o paximandi, cortado en gruesas rebanadas y tostado.

Los pescados más típicos eran salmonetes, lubina, rape, raya, caballa, aunque también les gustaba el marisco, como la langosta, cangrejos, sepia, calamares, pulpo, ostras, mejillones y vieiras.

Respecto a la carne, se comía carne de cerdo, de buey, de búfalo, de cabra y oveja. A veces en las carnicerías se asaba la carne dándola vueltas en un espetón y cortando tiras que se comían calientes (¿os suena de algo?). La cabra se prefería al cabrito, y el cordero más apreciado era el macho de un año castrado.
La caza también se tomaba: venado, gacela, jabalí, burro o asno salvaje, ciervo, cabras salvajes e incluso oso. Pero no conejo, aunque no he encontrado la razón por la que se despreciaba.

Las vísceras (hígado, sesos, médula, corazón y pulmones) también se comían y se consideraban nutritivas, sobre todo el hígado. Los sesos se consideraban un vomitivo, y por tanto se aconsejaba tomarlos con pimienta o mostaza

De las aves el más típico era el pollo. Se le suponía una comida buena y ligera. También se tomaba pato, ganso, codorniz, paloma, perdiz, grulla, zorzal y otras aves menores.

Los huevos de gallina, pato, oca o codorniz tenían distintos usos alimentarios. Con ellos se hacían muses o suflés.

La leche y la mantequilla no eran apreciadas y se consideraban alimento de los bárbaros del norte. Sin embargo, los dietarios recomendaban la leche recién ordeñada porque ayudaba a los humores buenos. Se debía tomar sola, mejor por la mañana, y esperar a digerirla antes de tomar otra cosa.

El queso era muy apreciado y se tomaba en gran cantidad

Sin embargo, la base de la alimentación era el pan, normalmente de trigo (el pan de avena sólo se consumía en las hambrunas, pues se consideraba comida de animales), el aceite, el vino, las legumbres y también las verduras de temporada. Se tomaban asímismo muchas frutas, pero sorprende la cantidad de frutos secos que apuntan los dietarios. A fin de cuentas, la actual Turquía es la mayor productora mundial de avellanas, así que parece que los frutos secos siempre han sido algo muy cercano a la alimentación de esa parte del mundo.

El arroz era raro, sólo de importación, y se tomaba cocido en leche con miel o azúcar.

Bueno, y creo que eso es todo por hoy.

Un saludo a todos.

lunes, 11 de octubre de 2010

Administración de Bizancio en tiempos de Justiniano

Hola a todos,

Recuperando el tema bizantino, en esta nueva entrada voy a incluir una breve reseña de la administración civil bizantina en tiempos de Justiniano.

Tal y como se puede ver en el diagrama, extraído del libro ‘The Cambridge companion to the age of Justinian’ de Michael Maas (pulsar sobre la imagen para ampliarla) el maestro de oficios encabezaba la administración. En tiempos de Justiniano, ese puesto estaba ocupado por Flavio Estrategio (al menos hasta 535, año en que fue nombrado comes sacrarum largitionum) El maestro de oficios, pese a constituirse como cima del aparato administrativo del imperio, no se corresponde a la idea que nosotros podríamos tener de un primer ministro. La administración bizantina no era tan piramidal como aparece en el gráfico o como puede ser la nuestra, sino que algunos departamentos tenían mayor poder que otros que se encontraban teóricamente por encima. Del mismo modo, al igual que ocurre en nuestra propia administración, las competencias no siempre estaban bien definidas, por lo que podía haber varios departamentos tratando de ejercer funciones muy similares.




Como regla general, el maestro de oficios recibía a los embajadores, controlaba la secretaría imperial, el departamento postal y dirigía las celebraciones oficiales. También controlaba a la policía secreta del emperador y supervisaba la fiscalidad aplicada por los prefecto, aunque no era él quien definía dichas políticas fiscales. A partir de 529, conjuntamente con el quaestor sacri palatii, el maestro de oficios se constituyó en el máximo juez de apelación para los juicios militares. También tenía a sus órdenes al comes domesticorum, a cargo de los scholae, la guardia de palacio dedicada a las celebraciones. Por el contrario, no tenía autoridad sobre los excubitores, los verdaderos soldados con los que contaba el palacio imperial.

El quaestor sacri palatii se encargaba de dar curso a los edictos del emperador y recibía las apelaciones que se le hacían.

El comes sacrarum largitionum era el ministro de finanzas, sólo actuaba a nivel de diócesis y provincial y se ocupaba de los ingresos y gastos del emperador. A su mismo nivel existían otras dos figuras en la rama fiscal, los prefectos, que eran los más importantes pues recaudaban el impuesto sobre la tierra, y el comes rei privatae, que se encargaba de gestionar la hacienda privada del monarca (su patrimonio y tierras personales)

Las prefecturas se dividían en diócesis, cada una de las cuales se supervisaba a través de un departamento específico scrinium en Constantinopla. Su administración era bastante compleja, y aunque el número de funcionarios con el que manejaban los asuntos era reducido en comparación con los ingentes números actuales, para la época resultaban muy numerosos.

Como muestra, en el lado judicial de la prefectura de Oriente existían nueve cargos principales:

o Cura epistolarum: Cuatro, uno para cada diócesis, Tracia, Asia, Póntica y Oriente. Se encontraban a cargo de la burocracia asociada con informes oficiales y correspondencia con los gobernadores provinciales en materias de finanzas e impuestos.

o Regendarius: Responsable de las infraestructuras y operación del servicio de correos y de emitir órdenes de detención.

o Ab actis: Responsable de los casos civiles y de los registros judiciales

o Commentariensis: Responsable de los juicios criminales (también he encontrado en otras fuentes este mismo título asociado a simples guardias)

o Primiscrinius: Responsable de que se cumplan los mandatos judiciales (Igualmente, este título está asociado al control de los tiempos en los juicios)

o Cornicularius: Persona que encabezaba el lado judicial de la prefectura y que controlaba al resto.

Cada uno de estos oficiales tenía una secretaría o scrinium supervisada por tres asistentes o adiutores apoyados por oficiales jefe administrativos o chartularii. Disponían también de un exceptor como supernumerarius que no cobraba, tan sólo las propinas establecidas (muy generosas), y que se mantenía a la espera de que se produjera una vacante.

Espero que esto os permita formaros una impresión de lo que podía ser una ‘administración bizantina’.

Un saludo a todos.

sábado, 9 de octubre de 2010

Nobel de literatura

Hola a todos,

Valga esta humilde entrada como felicitación a Mario Vargas Llosa por su merecido Nobel de literatura. Incluso a sabiendas de las influencias políticas que rodean estos grandes premios, cualquiera que se dedique a escribir creo que siente un gran respeto por aquellos que han recibido el más alto galardón que se concede a los literatos.

Mi más sincera enhorabuena.

Un saludo

domingo, 3 de octubre de 2010

Portada de 'El sueño de Justiniano'

Hola a todos,

¡Ya falta menos! Si no hay sorpresas de última hora, el 10 de noviembre saldrá a la venta en España mi segunda novela 'El sueño de Justiniano'. Y para ir abriendo boca aquí os dejo el borrador de la portada




Espero que os guste y os anime a leerla.

Un saludo a todos