domingo, 18 de septiembre de 2011

Yarmuk 636 (IV) la incógnita del tamaño

Hola a todos,




Pues sí, el tamaño sí que importa, ¡en los ejércitos, mal pensados! Uno de los eternos problemas a los que nos enfrentamos cuando se habla de una batalla ocurrida mil cuatrocientos años atrás, estriba en averiguar el tamaño de los ejércitos enfrentados. De sobra es sabido el interés de los cronistas que relatan la victoria de su bando por añadir unos miles de enemigos al contrario y restarlos de su lado, de forma que la hazaña conseguida fuera aún mucho más ilustre. Eso convierte las cifras de las fuentes en poco menos que ciencia ficción, y si no que lo digan los que escriben sobre la batalla de Gaugamela / Arbelas, en las que las tropas persas de Darío oscilaban entre los 140.000 y los 1.040.000 según el autor. Por tanto, para averiguar el tamaño de los ejércitos enfrentados, la única herramienta con la que contamos, aparte de ciertos conocimientos logísticos y poblacionales, es la lógica.

Según las distintas fuentes e investigaciones las cifras de tropas bizantinas oscilan entre los 15.000 – 20.000 hombres que proporciona Kaegi y los 200.000 que comentan las fuentes árabes de la época. Dado que los bizantinos superaban numéricamente a los árabes, es necesario conocer su número para averiguar el tamaño del ejército árabe, el cual también oscila mucho, llegando incluso a 24.000 – 40.000 según algunas fuentes.



Dado que saber el número exacto de combatientes es poco menos que imposible, nos conformaremos con dar una aproximación utilizando la lógica. Los 200.000 soldados de las fuentes son, obviamente, una exageración. En el culmen de su poder, durante el periodo de Justiniano, Bizancio contaba con unos 160.000 hombres distribuidos por todo el imperio, de los cuales sólo la cuarta parte eran tropas realmente fiables, el resto eran poco menos que milicias. De hecho, tenemos un detalle bastante preciso de los tamaños empleados por los ejércitos bizantinos en las conquistas de África, Italia, Persia y España, y siempre oscilaron entre los 15.000 y los 35.000 hombres. En tiempos de Heraclio, con las arcas vacías, tras el desastre del enfrentamiento con Persia y la reconstrucción posterior del ejército, es más que probable que la capacidad militar fuera aún menor, por lo que reunir 40.000 hombres en un solo punto de Siria se antoja una proeza. Los 20.000 hombres que indica kaegi parecen una cifra medianamente ajustada a la realidad. Además, se indica que, inicialmente, los bizantinos aventajaban a los árabes en una cantidad de 4 a 1, lo que, exageraciones aparte, arroja un ejército árabe de unos 5.000 – 7.000 hombres, que junto a los cerca de 6.000 que recibieron posteriormente como refuerzos deja un total de unos 11.000 – 13.000 combatientes, también cerca de la capacidad de los árabes en ese momento, quienes inicialmente no contaban con un enorme ejército y, además, debían contar con tropas de guarnición tanto internas como en previsión de un ataque sobre o desde Persia. Con estas cifras, el refuerzo árabe resulta significativo, tal y como las crónicas nos dicen que fue, mientras que si los árabes hubiesen contado con 30.000 hombres, incrementarlos en una quinta parte contra un ejército bizantino de cerca de 100.000 efectivos hubiese sido insignificante.



La última prueba que podríamos considerar para calcular el tamaño del ejército es la siguiente. Según las crónicas, el ejército del general bizantino tenía un frente de unos 13 kilómetros, mostrando Vahan su preocupación por cubrir un frente tan amplio con sus efectivos. Si su ejército hubiera contado con los 80.000 – 120.000 hombres que le asignan algunos autores, no hubiera tenido el más mínimo problema para cubrir dicho frente con una línea continua de ¡hasta 9 hombres de fondo! Sería un frente continuo más nutrido que una falange griega ¿cómo podría estar entonces Vahan preocupado? Igualmente, si hubiese dispuesto de 80.000 hombres contra 20.000 ó 30.000 árabes, ¿cómo hubiera podido perder una batalla en la que dispusiera de 50.000 tropas de ventaja. Por muy buena que fuera la caballería árabe sería imposible evitar un flanqueo y el consiguiente ataque por la espalda sobre el frente principal.

En definitiva, las cifras más creíbles sobre el ejército bizantino deberían oscilar entre los 20.000 y 25.000 hombres, mientras que los árabes no debieron juntar en el campo más de 15.000

La semana que viene, la última entrega…

Un saludo

6 comentarios:

Imperio Bizantino dijo...

Felicitaciones Salvador! El artículo sobre la batalla de Yarmuk es excelente.
Saludos,
Guilhem.

Salvador Felip dijo...

Hola Guilhem,

Me alegra verte de nuevo. Espero que te vayan bien las cosas al otro lado del charco.

Inicialmente pensé realizar sólo una entrada, pero resultaba demasiado pobre para todo lo que se puede contar de esa batalla, por lo que empecé a estirarme y, al final, ¡voy a estar un mes!

Un saludo

Imperio Bizantino dijo...

La verdad que vale la pena el esfuerzo y el empeño que le estás poniendo a Yarmuk. Ahora mismo me pondré a leer la V parte, de la cual ya he advertido excelentes gráficos de batalla. ¡Felicitaciones de nuevo Salvador! Y un gran saludo del otro lado del charco.
Guilhem.

Salvador Felip dijo...

Hola Guilhem,

Espero que te guste la última parte. Tenía unos gráficos muy buenos con el despliegue de las unidades en un terreno en relieve, pero las imágenes no me quedaban nada bien, así que me decidí por esta otra serie, que también resulta explicativa de lo ocurrido.

Un saludo

Guilhem dijo...

Lo mismo estas son muy gráficas. Están geniales, Salvador.

Salvador Felip dijo...

Hola de nuevo Guilhem

Gracias por el apoyo, aunque comparadas con el relato de Mantzikert que tienes en tu blog http://imperiobizantino.wordpress.com/batallas/, mis entradas son meros aperitivos.

Un saludo